Sin ninguna duda, uno de los problemas que presenta una mayor preocupación entre los hombres, tanto por su afección para llevar una vida normal como por sus implicaciones en el desarrollo de relaciones de pareja, están referidos a la existencia de una disfunción eréctil.
A grandes rasgos, cuando hablamos de disfunción eréctil nos estamos refiriendo a la dificultad o incapacidad recurrente de mantener la rigidez del miembro masculino durante el tiempo suficiente para el mantenimiento de una relación sexual satisfactoria.
Dado que, según diversos estudios médicos, este trastorno podrá afectar, a lo largo de su vida, a uno de cada cinco hombres en nuestro país, desde Vitalis Bienestar vamos a tratar de ofrecer una serie de recomendaciones útiles para prevenir la aparición de este trastorno y reducir sus efectos en caso de que se presente en tu vida.
Evita la aparición de disfunción eréctil con Vitalis Bienestar
Desde Vitalis Bienestar te confirmamos que la mejor forma de prevenir la aparición y los efectos de la disfunción eréctil es desarrollar, en general, unos hábitos de vida saludables, que se materializarán específicamente en las siguientes prácticas:
- Lleva a cabo una dieta completa y equilibrada, respetando, en la medida de lo posible, el horario de tus comidas.
- Realiza ejercicio físico a diario, o al menos dos o tres veces por semana, ya que esto contribuirá a mejorar el estado de tu sistema circulatorio.
- Trata de descansar lo suficiente, intentando completar las ocho horas de sueño al día.
- Evita, en la medida de lo posible, aquellas situaciones de tu vida diaria que incrementen tu ansiedad y estrés. En caso de que esto no sea posible, trata al menos de desconectar.
- Elimina el tabaco de tus hábitos y reduce lo máximo posible el consumo de alcohol, ya que presentan efectos depresores para tu organismo.
Más allá de todas estas actuaciones, antes de que te veas obligado a comenzar algún tratamiento médico que implique el consumo de medicamentos, desde Vitalis Bienestar te aconsejamos que consultes con tu médico de confianza las posibles repercusiones que puede tener dicho tratamiento, con el fin de ver la posibilidad de sustituirlo por un producto alternativo o tomar una dosis más reducida, si fuese necesario.
